Se informó que preferiría ser tratado con medicina china en lugar de cirugía, que puede ablandar los vasos sanguíneos y reducir el aneurisma.
Recientemente, ha habido especulaciones sobre la salud de Xi, ya que ha evitado reunirse con líderes extranjeros desde el brote de COVID-19 hasta los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing.
A principios de marzo de 2019, durante la visita de Xi a Italia, se observó que tenía una marcha anormal y una cojera notable, y más tarde, en la misma visita a Francia, se le vio buscando apoyo mientras intentaba sentarse.
Asimismo, en un discurso público en Shenzhen en octubre de 2020, su demora en presentarse, su lentitud para hablar y su frenética tos reavivaron las especulaciones de que tenía mala salud.
Los informes surgen en un momento en que la economía de China se encuentra bajo una severa presión debido al aumento de los precios del petróleo y el gas, las interrupciones de la cadena de suministro causadas por el conflicto en Ucrania y la estricta aplicación de una política de cero coronavirus.
Mientras el presidente de China entra en un tercer mandato histórico, China ha decidido tácticamente dejar de centrarse temporalmente en la “prosperidad compartida”, castigar a los gigantes tecnológicos y, en cambio, apresurarse a estabilizar la presión sobre la economía.
En vísperas del próximo 20º congreso del partido, el Partido Comunista de China (PCCh) se está alejando estratégicamente de su política de “co-prosperidad”, ya que el país no quiere ser un mercado menos atractivo para los inversores a medida que la economía se desacelera, porque según el informe.
Mientras Xi se prepara para ser reelegido para un tercer mandato de cinco años a finales de este año, ha intentado presentar a China como más próspera, influyente y estable bajo su gobierno.
Las autoridades del país, que hasta hace unos meses promocionaban una nueva era de “prosperidad compartida”, penalizando a los gigantes tecnológicos y a las celebridades ricas, ahora han cambiado su enfoque a mantener la economía estable y en crecimiento.
Grupos pro-elección atacan las casas de los seis jueces de la Corte Suprema designados por el Partido Republicano en las protestas del "Miércoles de Marcha".
Fecha de publicación: 12 de mayo de 2022


